miércoles, 20 de agosto de 2008

La canción del invierno

Oh no- here comes that sun again.
And (that) means another day without you my friend.
And it hurts me to look into the mirror at myself.
And it hurts even more to have to be with somebody else.

And it's so hard to do and so easy to say.
But sometimes - sometimes,
you just have to walk away - walk away.

With so many people to love in my life, why do I worry about one?
But you put the happy in my ness, you put the good times into my fun.

And it's so hard to do and so easy to say.
But sometimes - sometimes,
you just have to walk away - walk away and head for the door.

We've tried the goodbye so many days.
We walk in the same direction so that we could never stray.
They say if you love somebody than you have got to set them free,
but I would rather be locked to you than live in this pain and misery.
They say time will make all this go away,
but it's time that has taken my tomorrows and turned them into yesterdays.
And once again that rising sun is droppin' on down
And once again, you my friend, are nowhere to be found.

And it's so hard to do and so easy to say.
But sometimes, sometimes you just have to walk away,
walk away and head for the door.
You just walk away - walk away - walk away.
You just walk away, walk on, turn and head for the door.


Walk away - Ben Harper

miércoles, 13 de agosto de 2008

Trabalenguas II

Tú crees sentir algo que siento, pero la verdad es que lo que sientes que siento no es lo que en realidad siento. No siento lo que sientes, ni lo que crees que siento. Creo sentir lo mismo, pero a la vez distinto. Lo que sientes, pero de una manera diferente, con propósitos diferentes, algo sin sentido. A veces siento que lo que crees sentir no es algo alusivo a lo que dices sentir, sin sentimientos diferentes que, siento, debes aprender a diferenciar. Por ahora, sientes lo que sientas, lo que siento por ti no va a cambiar de rumbo. Quizás puedas seguir sintiendo lo mismo, con un enfoque diferente, pero siento que la reciprocidad no es algo que se sienta en esta situación. De veras, lo siento.

martes, 12 de agosto de 2008

Sin título


¿Qué se siente tener el cielo a tus pies y no poder volar? Sentir la brisa, el rocío más fresco rodar indemne por el semblante y hallarse en un mundo paradisíaco, aunque sea tan sólo por un instante. ¿De qué sirve tener toda esa maravilla sin que tus manos la puedan alcanzar del todo? Se va dando, acontece de poco en poco, irremediable y fulminante, alertando todo sentido descubierto y por descubrir. Tanto pasa alrededor, inconsciente y desapercibido. Basta que un acontecimiento inesperado se dé para propagar toda clase de emociones, pensamientos y sentimientos que, quizás en algún momento, fueron creados para luego ser empolvados por el tiempo, este último siempre con sus malas pasadas e imprevistas travesuras. Ese olor rancio que a veces desprendías es tan común en todas partes, que me deja pensando en interminables ilusiones, dejando volar mi imaginación, me ha hecho llegar a una conclusión explícita, gracias también a la experiencia: si lo pienso, no va a ocurrir. Por esta razón cierro mi mente cuando desea crear momentos placenteros, borrándolos de inmediato y reemplazándolos por un pesimismo letal, el cual deja mis expectativas por los suelos. Afortunadamente, esta receta que aparenta ser exacerbada, hace que las cosas siempre salgan mejor de lo que me esperaba. Siempre. Ahora sólo queda redimirme en mi actual teoría, esperando siempre lo peor, para no salir lastimada de algo que parece, pero no.