miércoles, 2 de mayo de 2018

¿Cuánto falta?

Hoy te vi caminando a varias cuadras de distancia. Estábamos caminando al mismo ritmo e íbamos a cruzarnos en unos minutos. Horas. Días. No vi mi si venían carros. Ni la hora, ni a los lados, ni a mí misma. Caminaba hacia ti y tú caminabas hacia mí.
Pensé tanto.
Tanto.
Lo único que me guiaban eran tus ojos. Tu mirada clavada en la mía me hacían sentir que pisaba nubes sin zapatos. Salió el sol, una luz naranja terrible hacía que te veas mejor que nunca. Te salieron alas. Yo flotaba y tú volabas.
Estamos cada vez más cerca y me pregunto tantas cosas.
Me pregunto.
¿Te abrazo? ¿Por qué me siento tan feliz? ¿Por qué sonríes de vuelta? ¿Por qué me da tanta risa? ¿Me estás mirando a mí? ¿Es por mí? ¿Tienes apuro? ¿Me está bajando la presión? ¿Cuánto va a durar esto? ¿Falta mucho? ¿Cómo va a ser? ¿Vas a seguir sonriendo? ¿Te estás burlando de mí? ¿Me vas a saludar? ¿Tengo ganas de hablarte? ¿Por qué no te mando a la puta mierda? ¿Te mereces estas manos frías en tu cuello? ¿Seguimos libres así?
Mis pies se hunden en la arena y no sé por qué estoy llorando. Tantos kilómetros me están obligando a pensar demasiado. Mi miopía está curada cuando se cruza con tus lentes sin medida.
Sólo me queda clara una cosa.
Quiero darte un beso que dure hasta que nos volvamos a encontrar.

No hay comentarios: